Jesús

01/05/2009 13:57

Piensa en lo que te sucedería si se te perdieran las llaves de casa o del coche. Ni la casa ni el coche serían útiles para ti.

“Yo sé los planes que tengo para vosotros, planes para vuestro bienestar y no para vuestro mal, a fin de daros un futuro lleno de esperanza. Yo, el Señor, lo afirmo” Jeremías 29:11

No podemos hablar de Jesús sin hablar del ser humano.

Las palabras con las que iniciamos este apartado iban dirigidas a unas personas que estaban en un país lejano al suyo, víctimas de un destierro, sintiéndose fuera de lugar en todo momento. Ellos estaban perdidos y  desorientados, lejos de su hogar.

Sin Dios, el ser humano está perdido porque no sabe ocupar su lugar en el mundo de Dios. Está perdido porque no ve para qué y por qué ha sido creado. Está perdido porque no encuentra el verdadero propósito de su vida. Nosotros nos hemos convertido en nuestro propio dios y, ese dios, seamos sinceros, no da para mucho.

Cuando estás perdido lo estás también para ti mismo: no sabes dónde estás o cómo llegar adonde quieres ir. Puede que sepas que estás perdido o puede que no. Muchos conductores se pierden antes de saber que se han perdido. Muchos están perdidos ante Dios, pero no lo saben. Creen sinceramente que saben dónde están, adonde se dirigen, y cómo llegar; sin embargo no es así y a menudo se dan cuenta demasiado tarde.

Vivir desorientados respecto a las realidades morales, personales y divinas, así como también a las físicas, nos lleva en ocasiones a cruzar líneas sin retorno. La inseguridad y el sinsentido se alojan en nosotros. Es entonces cuando cada uno por su cuenta quiere conformar una realidad que ahoge estas sensaciones angustiosas, intentando confeccionar una realidad a nuestra medida que nos proporcione un poco de tranquilidad (aunque sea superficialmente) para poder seguir viviendo.

Lo cierto es que uno puede pensar que los árboles son de color rosa, y otro afirmar que son de color amarillo y estar tan desesperado como para creer que es así, pero la realidad es que son de color verde. Por más que queramos evitarlo, las cosas son como son y no como cada uno las quiera ver. Existe una realidad objetiva y ésta es la que queremos conocer.

Volvamos al texto del encabezamiento… ¿por qué están estas personas en esta situación? Hicieron su rompecabezas dejando fuera a Dios. No quisieron seguir las instrucciones. Tenían una brújula que les indicaba el camino por donde ir… pero se les hizo pesado depender de ella: confiaron en sus capacidades para encontrar el camino y éstas les llevaron a la desesperación.

¿Quién es Jesús para nosotros hoy? La pieza del rompecabezas que falta para que encajen todas las piezas de la realidad, la brújula que me orienta en mi regreso a casa, ese lugar donde te encuentras seguro, donde encuentras paz…¡PAZ! Pero… ¿es posible? Jesús dice: Venid a mí los que estéis cansados y cargados y yo os haré descansar” (Mateo 11:28). Jesús es el único que puede ofrecerme descanso.

Jesús es la pieza en la que confluyen la realidad divina y la realidad humana. Una vez encajado en el puzzle personal de la existencia da el sentido al rompecabezas de la vida. Una vez decides dejarte orientar por la brújula, encuentras el camino a casa.

Dios sabía que estábamos perdidos y esta situación le dolía; así que vino, de manera entendible para todos, como uno de nosotros, movido por el gran amor que nos tenía; se hizo un pieza de puzzle, plausible, visible, accesible: Dios mismo se dio a nosotros en Jesús.

Sí, así de sencillo y complicado a la vez. Sencillo porque sólo tienes que aceptar que es el camino; complicado porque implica reconocer tu orgullo y autosificiencia (que si bien lo analizas te ha llevado a perderte cada vez más) y dejar de ser tú quien decida el diseño del puzzle o decidir dónde está el “norte”, el camino a casa. Él sabe que vives en una situación de desconfianza permanente, pero te lanza un reto: “Ven a mí”

En tu destierro emocional, espiritual, personal, hoy Jesús te dice: “Soy la pieza que te falta; tengo planes de bienestar y paz para tu corazón. ¿quieres salir de tu situación actual y volver a casa?”

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